Aprende más sobre tu cuerpo Sí, todos somos diferentes y son estas diferencias las que nos unen. Y ahora que se acerca el verano, puede que te cruces en la playa o en la piscina con gente que no tiene los mismos pezones que tú. Pero que no cunda el pánico. Antes de que te preguntes si esto es normal, te desvelamos la respuesta: ¡sí! Sin embargo, es importante que las mujeres que deseen dar el pecho tengan en cuenta la forma de sus pezones para aprender a manipularlos y cuidarlos.
El normal
Esta es la forma que tienen la mayoría de las mujeres. La punta del pezón sobresale unos milímetros de la areola y aumenta de tamaño cuando se estimula.
El piso
Como su nombre indica, la punta del pezón está al mismo nivel que la areola. Sin embargo, también aumenta de tamaño cuando se estimula.
La hinchada
Podría confundirse con el pezón plano, salvo que está ligeramente más hinchado y tiende a retraerse rápidamente cuando se le estimula. Las mujeres con un pezón inflamado pueden tener problemas para dar el pecho.
El ombligo
También se denomina pezón invertido. Se repliega sobre sí misma, en el interior de la areola. Esto ocurre, por ejemplo, cuando los conductos que llevan la leche de los lobulillos mamarios al pezón son demasiado cortos. Pueden extirparse quirúrgicamente. También en este caso la lactancia materna puede no ser posible.